¿Sabes cuánto vale tu coche en estos momentos?

Un coche pierde el 36% de su valor en dos años y casi el 50% cuando han pasado cinco, según un estudio elaborado por GANVAM

Siempre se ha dicho que en el momento que el coche sale por la puerta del concesionario, ya vale menos de lo que costó. Ahora, la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (GANVAM) cuantifica esta pérdida a través del Informe de Evolución de Valores de Vehículos de Ocasión de Eurotax.

Este estudio, que analiza el valor medio de las ventas reales efectuadas a particulares en el mercado de turismos y todoterrenos usados por tramos de edad a lo largo de 2018, revela que un automóvil pierde aproximadamente el 36% de su valor tan sólo dos años después de ser matriculado. Más concretamente, el valor residual medio fue del 63,8% en un coche de dos años en 2018, cuyo precio medio se situó en 18.239 euros al cierre del ejercicio.

Esta cifra supone que el valor residual de los vehículos con dos años de antigüedad descendió 0,6 puntos porcentuales, aunque su precio fue superior a la media registrada en 2017. Esto se debe, según Ganvam, a que el aumento del peso de vehículos jóvenes en los tramos de edad anteriores (de 0 a 2 años) produce un efecto dominó en este segmento, ya que el valor medio de los seminuevos es más alto e influye al alza de precios en los turismos y todoterrenos con dos años, lo que refleja que en su conjunto se han transferido coches de mayor precio.

Con cinco años ya vale la mitad

El valor residual en un coche con cinco años experimentó en 2018 un ligero ajuste a la baja con un valor promedio en porcentaje del 46,3%, lo que supone un valor medio de 13.846 euros. Esto que se redujo 254 euros con respecto a 2017.

En cambio, los coches con siete años sufrieron en 2018 un notable incremento, tanto en valor absoluto como en porcentaje, llegando a alcanzar los 10.850 euros y el 38% de valor residual en el mes de julio.

Y si pasamos la barrera de la década, los turismos y todoterrenos con once años se vieron menos afectados por la tendencia decreciente del mercado, especialmente en el caso de los diésel. El valor residual medio se situó en 5.152 euros, con un promedio del 18,9%, dos puntos porcentuales por encima del año anterior.

La era del renting

Con todas estas cifras no es de extrañar que, cada vez más, el renting sea una opción, ya no sólo para las empresas sino también para los particulares. La rápida devaluación de los coches, sumado a los gastos y las molestias del mantenimiento, hace que el usuario opte cada vez más por la fórmula del pago por uso. Ésta permite disfrutar del vehículo por una cantidad determinada al mes en la que se incluye además el mantenimiento. Tras el periodo de ‘renting’ acordado el cliente tiene la posibilidad de finalizar el contrato, cambiar el vehículo por otro o incluso quedárselo en propiedad pagando el resto de la letra del mismo mediante distintas fórmulas.

Las marcas automovilísticas han debido de adaptarse a este nuevo tipo de negocio, ofreciendo sus propias fórmulas de renting a empresas y particulares, lo que no sólo les permite adaptarse a los nuevos tiempos y la nueva mentalidad del comprador, sino además fidelizar más al cliente, ya que cada cierto tiempo éste puede ir cambiando entre los distintos modelos de la gama según sus necesidades y gustos actuales.

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