Grandes cambios en las cúpulas de las automovilísticas
Las detenciones de Rupert Stadler y Carlos Ghosn sacuden el sector de la automoción en 2018
El sector de la automoción se ha visto sacudido en 2018 por las detenciones de los directivos Rupert Stadler y Carlos Ghosn, además de por las multas que la Justicia Alemana ha establecido a Audi (800 euros) y al Grupo Volkswagen (1.000 euros) por el caso del software que alteraba las emisiones de algunos coches diésel. En mayo de 2017, Rupert Stadler renovó por cinco años más su contrato como presidente de Audi. No obstante, en junio de 2018, la fiscalía alemana incluyó al directivo entre los sospechosos de fraude y publicidad falsa por el "diéselgate". Audi admitió hace un año que sus motores V6 de 3.0 litros estaban equipados con un dispositivo considerado ilegal en Estados Unidos y que permitía a los coches evadir los límites de emisiones. En este contexto, Stadler y otros directivos permitieron comercializar vehículos con dicho dispositivo en el mercado europeo. En junio de 2018, Stadler fue arrestado en Alemania, por lo que fue suspendido temporalmente de sus responsabilidades corporativas. Después de cuatro meses y medio en prisión preventiva, Stadler fue puesto en libertad, aunque los consejos de vigilancia del grupo Volkswagen y Audi dieron su consentimiento para terminar con el contrato del directivo en el seno de la compañía. Actualmente, Bram Schot le sustituye en la presidencia de la firma. En el contexto del "diéselgate" Audi aceptó pagar una multa de 800 millones de euros por parte de la Fiscalía de Múnich. Por otro lado, el Grupo Volkswagen también aceptó el pago de una multa de 1.000 millones de euros por el mismo caso. [caption id="attachment_10761" align="alignnone" width="644"] Rupert Stadler y Carlos Ghosn[/caption] Otra de las grandes sorpresas en el sector de la automoción llegó desde Japón, cuando Carlos Ghosn fue detenido el 19 de noviembre por una supuesta violación de la ley sobre instrumentos financieros del país. La Fiscalía de Tokio lo arrestó por incumplir la legislación fiscal del país asiático en relación con sus ingresos personales. Nissan y Mitsubishi destituyeron directamente a Ghosn como presidente de ambas compañías, pero Renault todavía lo mantiene en "stand by" como presidente y director general al no haber encontrado irregularidades tras la realización de una auditoría preliminar. Actualmente, Thierry Bolloré es su sustituto de forma interina. Ghosn fue acusado en Japón por haber declarado unos ingresos inferiores a los que percibió en realidad como máximo responsable de Nissan. Concretamente, publicó una compensación de menos de la mitad de los 88 millones de dólares que recibió entre 2010 y 2015. Posteriormente, la Fiscalía de Tokio lanzó una nueva acusación contra Ghosn, en la que supuestamente el directivo traspasó a la compañía operaciones personales, causándole un impacto por valor de 14,5 millones de euros.